Pastel de puré de patata y salsa boloñesa
Maruxa, de Galicia aunque madrileña de adopción, nos envía esta “provechosa” receta:
La idea es aprovechar los restos de una salsa boloñesa que hayamos hecho para acompañar un plato de pasta. Merece la pena cocinar una cantidad generosa de salsa, por muchos motivos: para que todos los comensales puedan servirse cuanto quieran; porque seguramente compraremos más carne picada de la necesaria y así la cocinaremos toda de una vez y nos aguantará algo más en la nevera; y además porque de ese modo aprovecharemos también la lata de tomate entera, que una vez abierta se debe consumir en pocos días.
Ingredientes
Salsa boloñesa (en su versión más sencilla)
– Carne picada
– Tomate triturado
– Cebolla picada
– Sal
– Aceite de oliva
– Orégano
Puré de patata
– Patatas
– Aceite de oliva
– SalPastel de puré de patata y salsa boloñesa
– Salsa boloñesa
– Las verduras y hortalizas que nos gusten para añadir a la boloñesa: champiñones, pimiento, guisantes, calabacín…
– Puré de patata
– Queso ralladoElaboración
Para hacer la salsa boloñesa necesitaremos una sartén grande. En primer lugar rehogaremos la cebolla picada con un chorrito de aceite de oliva, después la carne picada y por último el tomate triturado. Se puede condimentar al gusto, por ejemplo con sal y orégano.
Con lo que quede de salsa boloñesa tras haberla comido con pasta, haremos el relleno del pastel. Si queremos darle un toque diferente, para que no nos sepa igual que la que ya comimos, podemos añadirle otras verduras y hortalizas. En ese caso, les daremos una vuelta en la sartén con un poco de aceite antes de mezclarlas con la salsa boloñesa. Por ejemplo, podemos utilizar un pimiento verde y dos o tres champiñones bien lavados y cortados en trocitos pequeños. Incluso puede quedar muy bien con unas judías verdes o unos guisantes cocidos que nos hayan sobrado de otro plato.
Para el puré de patata, coceremos las patatas peladas y cortadas en trozos y las machacaremos con un tenedor en un bol, con una pizca de sal y un poco de aceite de oliva (o mantequilla).
Por último, pondremos en una fuente de horno una capa de puré de patata, otra con el relleno que hicimos con la boloñesa y una última capa con puré de patata, cubriendo bien todo. Añadiremos queso rallado por encima y unos minutos al horno. Como los ingredientes ya están cocinados, no necesita mucho tiempo de horno, solo lo justo para derretir y dorar un poco el queso.
Consejo final: como el pastel saldrá del horno a mucha temperatura y es muy difícil desmoldarlo sin destrozarlo, conviene sacarlo del horno un rato antes de servirlo, para que se enfríe un poco y podamos comerlo sin quemarnos.
¡Buen provecho y buen aprovecho!