Esta semana el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente celebra la Semana de los Productos Pesqueros, bajo el eslogan «¡La fiesta del pescado!, dirigida a fomentar el consumo sostenible de este alimento, básico en la dieta mediterránea.

Consumir pescado y contribuir a la mejora del estado de los mares y los recursos pesqueros es posible y los consumidores debemos ser conscientes del papel fundamental que desarrollamos.

HISPACOOP ha recopilado algunos consejos aprovechando esta semana:

• Consumir semanalmente al menos tres raciones de pescado o mariscos. La Dieta Mediterránea aconseja incluir pescado azul en nuestro menú semanal, ya que, son más ricos en Omega3 que los blancos.
• Realizar una compra responsable. Según el MAGRAMA un consumidor responsable debe hacerse tres preguntas al realizar su compra en la pescadería: qué especie va a consumir, cómo ha sido capturada y dónde ha sido pescada. Dependiendo de esos factores los peces están clasificados con tres colores: verde o consumo recomendado, amarillo o consumo con moderación y rojo o consumo no recomendado. (Consultar “Guía de pescado para un consumo responsable” de WWF).
• Rechazar tallas mínimas, si la tiene asignada por ley, y elegir pescados de temporada. Pida información en su pescadería. Siempre hay opciones para hacer una compra responsable, de calidad y a buen precio
• Añadir a la dieta especies de pescado y marisco no sobreexplotadas. La Guía de FEDEPESCA recoge recetas con especies que no son muy habituales en la cesta de la compra.
• Para saber si estamos comprando pescado fresco hay que recordar que debe tener las branquias rojas, las escamas bien adheridas al cuerpo y brillantes. Su carne debe ser firme, que no ceda a la presión del dedo y los ojos, brillantes. Los mariscos no presentarán manchas negras.
• Al adquirir mejillones enteros frescos u otros moluscos bivalvos, éstos deben estar «vivos», lo que se comprueba porque las valvas se encuentran cerradas. Si están abiertas, compruebe que se cierran con un golpe suave.
• El pescado fresco puede conservarse uno a dos días en el frigorífico, siempre en la parte más fría, y hasta tres meses en el congelador.
• Es recomendable limpiar el pescado (descamar, destirpar y separar la cabeza). También lavarlo, secándole después el exceso de agua antes de congelar.
• Evite descongelar y volver a congelar los pescados y mariscos. Hágalo dentro del frigorífico, en una fuente con rejilla para que no se mezclen los jugos, y una vez cocinados, consúmalo lo antes posible.